Si aún no os habéis decidido con las fotografías después de vuestra boda, en este post os doy todos los consejos para vuestra sesión de postboda en Murcia. Así entenderéis la importancia que tienen.

La sesión de postboda es un capricho muy especial que os animo a daros por numerosos motivos:

1. Podréis poneros una vez más el traje de vuestro gran día.

Os pasasteis meses con todos los preparativos, entre ellos, el traje. ¿Contasteis el número de veces que os lo probasteis? Luego llegó el día tan esperado y todo pasó tan rápido… Es la excusa perfecta para revivirlo, disfrutarlo y amortizarlo! No hará falta que lo llevéis a la tintorería, las posibles manchas se podrán disimular. Además, vais a ir tan guapos con él puesto 🙂

2. Se trata de sesiones más íntimas, pausadas y relajadas.

Vosotros estaréis más tranquilos y centrados a solas con la cámara. Vuestro gran día es una vorágine de emociones, de gente, de fiesta… Disfrutadlo, porque más adelante sabéis que tendréis vuestro momento en una sesión de postboda única y muy especial.

3. Podréis arriesgaros.

Un lugar diferente donde despedir nuestros trajes de boda. Podremos meternos en el agua, andar de puntillas por el césped o revolcarnos por la arena!

Pensad en lo que os apetece: playa, montaña, rincones abandonados, otra ciudad. Hay cabida para cualquier cosa, los límites los ponéis vosotros. Intentad incluir en la sesión vuestras aficiones comunes, un lugar que os guste a los dos.

También podemos añadir detalles molones como luces, humo, bicis, mascotas, confeti, aquel coche que te llevó al altar…

4. Estilismo más desenfadado.

Podéis hacer una reproducción exacta del estilismo de vuestra boda o darle un aire más cómodo y casual. Me encantan las sesiones de postboda con vuestra melena al viento o con zapatillas de deporte! A vuestro aire, sin protocolo, disfrutando al máximo!

5. Disfrutaréis al 100% tanto el día de la boda como en la sesión.

Sabiendo que más adelante haréis una sesión de postboda donde os podréis explayar lo que queráis, ganaréis tranquilidad el día de vuestra boda. Podréis decidir si tendréis unos minutos de exteriores o «posado» de recién casados o disfrutar del cocktail al máximo, estando desde el comienzo del mismo con toda vuestra gente. Además, ya no importará que tras la ceremonia se haga de noche, que la luz no sea todo lo bonita que os gustaría, que lleguéis tarde la restaurante o que haga demasiado calor. Esos factores pasarán a un segundo plano puesto que una sesión al 100% os está esperando.

Es un momento de calma mutuo, un momento muy privado para vosotros: abrazos, besos, miradas, gestos únicos y auténticos. Desconectaréis de toda la presión, ahora os toca a vosotros solos!

6. Podréis incluir la sesión en el álbum.

Vuestro álbum ya es súper completo regalando al fotógrafo la experiencia de vuestro gran día pero, ¿y si encima os decantáis por meter algunas fotos de vuestra sesión tras la boda? Incluso podéis incluirlas en un álbum aparte puesto que os va a gustar tanto que querréis darle todo el protagonismo!

7. Hablad con el fotógrafo de cada detalle y fijad un fecha.

Todo aquello que os apetezca podremos hablarlo e intentar que se lleve a cabo. Dejaros aconsejar y fijad una fecha que no se aleje demasiado del gran día, así todo se podrá entregar al mismo tiempo y estará muy reciente. Repetid todos los detalles que fueron importantes en vuestra y incorporar los que os apetezcan. Hay cabida para casi todo!

 

Si tienes más dudas podéis escribirme sin compromiso aquí.